Te escribo siempre en mis silencios,
Te miro en el espejo y luego me doy cuenta que no eres el mismo que ayer,
Tu rostro deslavado denota huellas que te hacen parecer alguien desconocido,
Y no es posible que estés así
Incapaz de articular una palabra, de hacer algún movimiento,
Inerte
como si a tu cuerpo le faltase tu alma, así te siento yo, tan lejano, tan distante,
Te espero...
Pero no llegas, me has borrado de tu memoria, lo cual me produce cierta incertidumbre, desde mis adentros te digo: Te recuerdo y te tengo presente, lo acepto y
Duele
El reencuentro no llegó y la esperanza murió, afortunada el alma que sabía que esto pasaría, lágrimas saladas que se funden en el abismo que cae a un mar sin fin y que más tarde se encuentran pero no se mezclan, se topan pero parecen no importarles,
Vendrá la resignación
En algún momento, pero mientras tanto deja que saque todo este amor
que quema mis entrañas, todo este amor que derrite mi alma,
Solo quiero dibujar una sonrisa en tu alma, déjame ser quien lo haga...
Respírame
Esa sería la única manera, vive en mi cuerpo y alma y así te darás cuenta que
Eres tú y
Siempre has sido tú...
...Scentio ergo sum...